La ermita de San Juan de Letrán
Sus orígenes se remontan a la fundación en 1515 del hospital de San Juan de Letrán, regentado por franciscanas concepcionistas, que establecieron aquí su convento. Tras el traslado de éste al centro de la población a finales del siglo XVI, quedó la iglesia como ermita solamente. La ermita actual, no obstante, no es sino la cabecera del edificio de una nave que, posiblemente, se planteó levantar en el siglo XVIII, pero del que sólo llegó a realizarse la capilla mayor. Es de planta cuadrangular, de ocho metros por siete en la base, cubierta con media naranja sobre trompas y dotada de un gran arco toral de donde hubiera arrancado la nave que no llegó a realizarse.
Como obras de interés conserva una talla de San Juan Evangelista, del siglo XVIII, y un Crucificado contemporáneo de enormes dimensiones realizado por el tallista local Jesús González.